Viajo por las letras con la maleta llena de libros. Escribo novelas y relatos, pero si me siento poética la lleno de poesía o de lírica. Soy "cuentista". ¡Otros van más allá e incluso publican mis historias! Os deseo un paseo agradable por mi blog. Mis trabajos están registrados, podéis usarlos citando la procedencia y sin alterar su contenido, siempre y cuando se utilicen para actividades sin ánimo de lucro.

viernes, 15 de abril de 2016

Bella y alicaída, la musa sonreía


Bella y alicaída, la musa sonreía.

Héroe le llaman, pues consiguió ganar mil batallas, mas su amor, Esperanza, es una musa alicaída y bella como Afrodita que habita en un país lejano. 
 
 —Tras haber salido Eolo de su aposento, me ha prestado uno de sus vientos. 

Raudo y veloz partió a conquistarla. 

—No es tan grande la distancia como la fuerza de los vientos, debo ir por ella, me lo pide el alma.
 
¡Barco de vela a la vista!
Cantos y rezos. Brilla su túnica en gris.
Le recibieron con pleitesía tras recorrer tan larga distancia.
Aprovechóse el príncipe de la fantasía y de la ausencia del marido para intentar enamorarla.
Esperanza por el príncipe héroe fue raptada. Dicen… que ella verdaderamente le amaba.
¡Vida feliz la del amor correspondido!, triste la dicha del hombre abandonado quien, sabiendo que raptada fue su amada, partió a buscarla valeroso.
El corazón y la pasión se lo rogaban.
Lucha encarnizada, cruce de espadas, la batalla…Herido ganó lo que, creía, era una pelea; mas percatóse el marido, empecinado y luchador, que la guerra también ganaba. Aún sangraban sus heridas y a su amada, Esperanza, recuperaba. Mirándola todavía con leve desconfianza, a su bella “Hera” perdonó, pues por sortilegio de los dioses había sido seducida.
Un hombre ¡enamorado!, mil puñales y un príncipe embaucador que, por su musa y, gravemente herido, muere. Mientras...ella regresa a su palacio en la distancia.

Bella y alicaída permanece la musa.


María Teresa Fandiño Pérez
16/04/2016
La Coruña, España
Derechos reservados.

https://issuu.com/carmenmembrillaolea/docs/gealittera_20._distancia




sábado, 2 de abril de 2016

COLOR DE PRIMAVERA publicado por territorio de escritores



De rojo en primavera.

Me vestí de rojo color cereza, escote pronunciado, poca tela.
Una cinturita amorosa.
Llevaba unos enormes tacones que manejaba como títeres, ¡una mañana de Marzo que lucía espléndida! Sus mañanas tienen cara de mariposas.
La primavera llegaba y su olor embriagaba, jazmín y rosas, hierba recién cortada. El calor subía poquito a poco. Salí a la calle con aquel vestido muy orgullosa, una cerveza en la terraza de un bar, cruce de piernas, ¡comienza la primavera!
Paseando por entre las hortensias le vi, su mirada se clavó en mí, en mi vestido color cereza, en mis piernas y, de arriba abajo, me observaba lentamente con sutileza.
Me sentí una diosa. Observé su mirada en sus ojos negros.
¡Cómo le sienta la camisa!
Y su sonrisa…
Me apasiona su pelo negro ondulado, sus hoyuelos, la cremallera de su pantalón vaquero y esa mirada suya cuando, sujetando mi cintura con sus brazos, me susurra al oído ¡te quiero!


María Teresa Fandiño
26/03/2016
Derechos reservados.
Imagen obtenida de la red









viernes, 1 de abril de 2016

Otelo muere por Desdémona

Otelo muere por Desdémona.

De celos y pasión él se envenena.
¡Injurias sin razón! Burlado llora
por Desdémona, ¡dulce magia mora
en Venecia! el amor sufre de pena.

Maldita la  gran farsa que lo llena
todo de cobardía, y después  llora.
Sátira, burla, su gran canal ora
por venecianos muertos sin condena.

Piel morena se dejó cegar, ¡malditos!
¡La sangre a jarras! las garras sutiles,                                             
Traición de unos "amigos" eruditos.

Sufrió de injuria, sátiras viriles.
¡Por celos la mató! Lamentos, gritos.
De amor se suicidó ¡Tumbas febriles!

María Teresa Fandiño
Derechos reservados.
02/04/2016
Imagen obtenida de la red.